Cañarにあるバケーションレンタル

Un lugar muy acogedor en una zona tranquila de Paute

es un lugar hermoso tranquilo Familiar , con todas las comodidades para pasar un fin de semana exelente, lugar de caminata perfecto los senderos, de seguro regresaría

Excelente lugar para pasar en familia y amigos,lugar limpio, Excelente recibimiento, lo único es tener en cuenta que la subida en un camino sin asfalto, y la subida a la casa es un poco complicada de allí todo bien

Hola, fuimos bien recibidos con snack como detalle, el lugar es muy tranquilo y acogedor la casa tiene todo lo necesario para pasar los días, con mi pareja nos encanta caminar y ver hermosas vistas y este lugar nos lo brindó. Como consejo les recomiendo ir por el lado de cuenca a la Raya y no desde azogues hasta lado laguna porque no encontrarían tiendas en el sector de la raya encontrarán un pueblo con muchos comercios y además una panadería con unos ricos panes y calientitos. Además la laguna de guabizhun está a 17 minutos a pie y el restaurante laguna lounge súper delicioso y precios accesibles.

El alojamiento está bien ubicado, tiene una vista espectacular de la ciudad, zona tranquila, la anfitriona siempre está pendiente, sin duda volveremos. gracias por todo

Hermosa Quinta, muy bien mantenida, perfecta para descansar. Central, muy cerca de Cuenca, pero a la misma vez suficientemente retirada proyectando tranquilidad y paz. Sus amenidades atraen para un mejor descanso. Nuestros jóvenes adultos disfrutaron la cancha de Tenis, Basquetbol y juegos de mesa. Al final del día relajarse al pie de la chimenea eran de los mejores momentos... Recomendamos esta Quinta 100%.

Excelente lugar para estar en familia y en la tranquilidad del campo don Rigoberto muy amable y pendiente de todo volvería sin dudarlo

Fue un lugar acogedor, la anfitriona siempre esta disponible para cualquier inquietud

Todo perfecto, tal cual está anunciado. Queriamos pasar unos dias en soledad, descansando sin ninguna preocupacion y resultó perfecto. Caminatas por el vecindario, por el rio, las viejas vias abandonadas del ferrocarril. Mucho verde y enorme tranquilidad. Ademas nos sentimos muy seguros, algo que en Ecuador es cada dia mas importante. Hay transporte de buses y taxi-camionetas a 300 metros. Está a solo 20 minutos de Cuenca. El alojamiento está perfecto, limpio y decorado con muy buen gusto. Tiene todas las comodidades prometidas, y aun mas: tiene un hogar donde pudimos disfrutar de unas buenas fogatas. :) El anfitrion, Juan, super atento y pendiente de que todo salga perfecto. Super recomendable. Responde al instante a cualquier inquietud. Hay buena señal telefonica, y el internet es muy bueno. Recomendable para descanso y vida interior, no para el que pretenda restaurantes o vida de ciudad.